Siempre está la oportunidad de “recrearse” con un genio como lo fue John Lennon. Hace pocos días, en el Recoleta, se vio la exposición del fotógrafo estadounidense Bob Gruen quien, seguramente como muy pocos, pudo acceder a la intimidad de Lennon y retratarla. Ahora, la misma obra llega a través del libro que entre nosotros editó Planeta: “John Lennon: los años en Nueva York”.
Simultáneamente, se ha editado “Las cartas de John Lennon”, del periodista británico Hunter Davies. Este recopiló un conjunto de 300 documentos: allí aparecen cartas, postales, telegramas, apuntes para canciones, dibujos, dedicatorias. Y que, de alguna forma, reflejan la desbordante personalidad de uno de los cuatro grandes de Liverpool.
Allí se documenta, por ejemplo, la tensión entre John y McCartney a comienzos de los 70, luego de la separación de los Beatles. Una de esas cartas es un misil contra Paul: “¡Bajate de tu disco de oro y vuela!”.
Pero cinco años más tarde, los McCartney visitaron a Lennon y Yoko en el edificio Dakota, en Nueva York, y se restableció la paz ... También, a través de la documentación recopilada por Davies, aparece la relación entre John y sus fans, John y sus familiares. Hasta que “el sueño terminó” por los disparos del lunático Mark Chapman, en 1980.
Simultáneamente, se ha editado “Las cartas de John Lennon”, del periodista británico Hunter Davies. Este recopiló un conjunto de 300 documentos: allí aparecen cartas, postales, telegramas, apuntes para canciones, dibujos, dedicatorias. Y que, de alguna forma, reflejan la desbordante personalidad de uno de los cuatro grandes de Liverpool.
Allí se documenta, por ejemplo, la tensión entre John y McCartney a comienzos de los 70, luego de la separación de los Beatles. Una de esas cartas es un misil contra Paul: “¡Bajate de tu disco de oro y vuela!”.
Pero cinco años más tarde, los McCartney visitaron a Lennon y Yoko en el edificio Dakota, en Nueva York, y se restableció la paz ... También, a través de la documentación recopilada por Davies, aparece la relación entre John y sus fans, John y sus familiares. Hasta que “el sueño terminó” por los disparos del lunático Mark Chapman, en 1980.
Fuente: http://www.larazon.com.ar
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