«Imagina que no hay paises/No es difícil hacerlo/Nadie que mate o muera/Y tampoco religión», canta Lennon en el tema, que formó parte de la banda sonora de la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres. Y dado que el evento estaba siendo retransmitido en directo en todo el mundo, puso en aprietos a los responsables de una televisión directamente vinculados al partido gobernante en Turquía, el islamista Justicia y Desarrollo (AKP) de Recep Tayyip Erdogán. Ante este dilema, la televisión optó por una solución imperfecta: el presentador del evento, encargado de traducir la canción, omitió la referencia a la religión, según informa la televisión privada NTV. El resto de la canción fue, sin embargo, traducida sin problemas.
Los esfuerzos del gobierno turco por ampliar la penetración religiosa en la vida pública se han acelerado notablemente durante el último año. Entre las últimas medidas adoptadas se encuentra la segregación por sexos en los campamentos juveniles desde este verano, la subida vertiginosa de impuestos al alcohol y las crecientes prohibiciones a su consumo en determinados lugares, la construcción de mezquitas gigantes en diversos lugares emblemáticos de Estambul y otras ciudades, o la introducción de restricciones a la libertad de prensa por criterios «morales».
Fuente: http://www.abc.es
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