viernes, 21 de febrero de 2014

Convierten en un complejo de viviendas un edificio que Pink Floyd volvió icónico


 
Los amantes de la música -especialmente la inglesa- reconocen la silueta del edificio al instante. Y aquellos no tan fanáticos seguro deben tenerla de vista. Con sus cuatro chimeneas grises y la imponente estructura de ladrillo, el edificio de la vieja planta de energía Battersea de Londres es una de las postales de la ciudad desde que Pink Floyd la eligiera para la tapa de uno de sus discos, Animals, y los Beatles la usaran de escenografía en su película Help!. Hoy, después de muchos años de abandono y proyectos truncos, Battersea está próximo a convertirse en un exclusivo complejo de departamentos, con valores que llegan hasta las 30 millones de libras.
La firma de bienes raíces propietaria del mítico edificio londinense anunció ayer que lanzará a la venta una serie de condominios y departamentos ubicados dentro de la ex central eléctrica, con precios que -se estima- pueden llegar a alcanzar las 30 millones de libras en el caso de los penthouses (Unos 389 millones de pesos aproximadamente), similares a las mansiones más exclusivas de la ciudad.
El objetivo final es convertir el edificio y los alrededores en un nuevo barrio de viviendas que albergue con el tiempo hasta 3500 casas, cines, shoppings, centros culturales y cerca de 200 locales. Sin embargo, aunque un argentino dispusiera de ese dinero y quisiera comprar un departamento allí, no podría, ya que los administradores anunciaron que la preventa -que comenzará en mayo-se realizará solamente para quienes residan en Londres. Esta medida busca mejorar la complicada situación habitacional de la ciudad -Mucha demanda y poca oferta disponible-y evitar que los departamentos terminen en manos de inversores extranjeros. En los últimos años, Londres se ha vuelto una meca de los nuevos magnates rusos petroleros.
La central eléctrica de Battersea es considerada un ícono de Londres, y se encuentra dentro de una lista de edificios protegidos grado II, apenas por debajo del Palacio de Westminister o el puente Tower Bridge. Fue construida en 1930 sobre el margen sur del río Támesis para abastecer a la ciudad de energía generada a base de carbón.
Como se temía que por su gran tamaño terminase dañando la vista de la ciudad, el diseño del edificio fue encargado al arquitecto Giles Gilbert Scott, famoso por haber diseñado la catedral de Liverpool y las también icónicas cabinas rojas de teléfono. Debido a la fuerte crisis posindustrial que sufrió Londres a fines de los 70, Battersea debió cerrar una de sus dos estaciones en 1977 antes de apagar definitivamente las chimeneas en 1983.
En el medio, Pink Floyd eligió al edificio como portada de su disco Animals, que buscaba reflejar la crisis económica -y humana- que atravesaba el Reino Unido a través de un trabajo conceptual que incluía referencias al libro Rebelión en la Granja, de George Orwell. Para eso, inflaron un cerdo gigante con helio y lo pusieron a flotar alrededor de las chimeneas, una imagen producida por el estudio de artistas Hipgnosis que se volvió un ícono con el tiempo.
Hoy, esa imagen icónica está cerca de convertirse en una vista desde el balcón para algunos privilegiados que tengan bastantes libras en el bolsillo.

Fuente: http://www.clarin.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario